Un marzo timador
Una vez soñé que eras demonio
y casi me quemo con el fuego.
Una vez te pensé de mis alegrías protagónico,
pero cambiaron las reglas del juego
apenas te tuve en mi dormitorio.
Lancé llamas al aire por los ojos
pero sólo a mi misma me quemaban.
Contradije mis intuiciones con enojos
y las raíces que por un tiempo me controlaban.
Una vez te autoproclamaste fanfarrón
y eras más que todo timador.
Corazón loco corazón que busca la pasión,
éste narcisista es sólo un bufón.
Sólo espero de la vida la dulce venganza,
soledad y arrepentimiento bajo encanto
acompañarán el alma turbia con desesperanza.
Comentarios
Publicar un comentario